21 DÍAS DE ORACIÓN Y AYUNO

El ayuno es una práctica que se ha llevado a cabo a lo largo de los tiempos en todo el mundo. Además, es una disciplina espiritual que aparece mucho en las Escrituras. Lo vemos en todo el Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento. Vemos grandes e inspiradores ejemplos de ayuno, como Moisés (Éxodo 34:28), Daniel (Daniel 1:12-17; 10:2-3), Ester (Ester 4:16) e incluso Jesús y el apóstol Pablo. Luego, la Biblia también nos muestra malos ejemplos de personas que practicaban el ayuno, como los religiosos hipócritas del Evangelio. 

El ayuno tiene un poderoso impacto en nuestra relación con Dios y nos ayuda a seguir creciendo en Él. De forma sencilla, podemos definir el ayuno como "abstenerse intencionadamente de una necesidad o derecho legítimo para perseguir a Dios con mayor esfuerzo y concentración". Puede haber mucha confusión sobre el tema, e incluso cierta resistencia. Lo mejor que podemos hacer es mirar las Escrituras para obtener una imagen clara con respecto a la sorprendente y poderosa experiencia del ayuno. 

No es de extrañar que Jesús sea quien más nos enseñe sobre el ayuno. Nos enseñó con su ejemplo. Al principio de su ministerio, ayunó durante 40 días cuando estaba en el desierto venciendo la tentación. En el Sermón de la Montaña, dijo en Mateo 6:16-18, NLT, "Y cuando ayunen, no lo hagan evidente, como hacen los hipócritas, que tratan de parecer miserables y desaliñados para que la gente los admire por su ayuno. Te aseguro que esa es la única recompensa que obtendrán. Pero cuando ayunes, péinate y lávate la cara. Entonces nadie notará que estás ayunando, excepto tu Padre, que sabe lo que haces en privado. Y tu Padre, que lo ve todo, te recompensará".

Observe que Jesús dijo "cuando ayunen" y no "si ayunan". Él está enseñando con la suposición de que todos los creyentes seguirán su enseñanza y ejemplo en cuanto al ayuno. Jesús aclara que ayunamos para la audiencia de uno: Dios el Padre. En los Evangelios, Él enseña que el ayuno es poderoso cuando se practica con oración y fe (Mateo 17:21). "Se pueden mover montañas y nada es imposible". Afirma que hay un tiempo y una temporada para el ayuno (Mateo 9:14-15) y nos advierte que el ayuno es inútil si se practica como una disciplina externa si nuestra vida interior no está alineada (Lucas 18:12-14; Mateo 23:25-28) 

Hay muchas formas de practicar el ayuno: 

- Puede practicarse a diario, semanalmente, mensualmente o por temporadas

- Puede ser un ayuno intermitente, durante una parte del día

- Puede ser el ayuno de ciertos alimentos, al igual que Daniel se abstuvo de ciertas comidas y bebidas

- Puede ser ayuno de sólidos y sólo beber agua o caldo

- Y por principio puede ser ayuno de otros derechos o necesidades legítimas, como el consumo de medios de comunicación, o las redes sociales, del uso del teléfono. 

- También puede ser un ayuno completo, en el que durante un tiempo determinado te abstienes de comida y agua (una palabra de precaución aquí... Yo recomendaría construir la disciplina del ayuno y no lanzarse hasta que estés preparado. También consulte con su médico si tiene alguna duda o preocupación sobre cómo su propio cuerpo puede estar preparado y cómo responderá a una temporada de ayuno más intensa). 

Podemos aprender estas cosas a través del ayuno:

- Negación de sí mismo - Es el ejercicio de decir "no" a nosotros mismos para poder decir más fácilmente "sí" a Dios. Lucas 9:23, NVI, 'Entonces les dijo a todos: "El que quiera ser mi discípulo que se niegue a sí mismo, que tome su cruz cada día y me siga. '

- Claridad - Podemos escuchar a Dios más claramente cuando ayunamos.

- Perspectiva - Nuestra perspectiva se replantea, y somos capaces de darnos cuenta de que nuestros apetitos e impulsos no están construyendo valores eternos. Podemos fijar nuestros pensamientos en lo que es verdadero, noble y eterno. Podemos dominar el hábito de ceder a mis impulsos. 

- El ayuno influye en las personas que nos rodean. (Isaías 58:3-11, NLT)

El ayuno NO es: 

- Una huelga de hambre para torcerle el brazo a Dios o acorralarlo para obtener una respuesta. 

- No hay que confundirlo con una dieta (¡se perdería por completo el objetivo!)

- No hay que confundir el ayuno de medios o redes sociales con una desintoxicación digital

- Y Pablo advierte y establece unas claras barreras de seguridad a la hora de ayunar la intimidad con tu cónyuge para que no se convierta en manipulación, venganza emocional o en un choque de trenes relacional (I Cor 7:5)

El verdadero ayuno es la "búsqueda diligente de Dios durante un tiempo establecido" al abstenerse intencionalmente de una necesidad o derecho legítimo. 

Queremos animarte a que dirijas tus oraciones durante el ayuno. El ayuno nos capacita de manera única para liberarnos de las dinámicas opresivas en nuestra vida espiritual, emocional, habitual, financiera y físicamente. Pida al Señor que le muestre las áreas a las que debe dirigirse durante su tiempo de ayuno y oración. Creemos que, si oramos y buscamos a Dios y le damos lo mejor de nosotros a principios de año, ¡Él bendecirá todo nuestro año (Mateo 6:33)!

Para más información sobre la oración, visite nuestra página dedicada a la oración aquí

La Biblia habla mucho de la oración: la oración colectiva, la oración de intercesión y la oración individual. Cuando reforzamos nuestro tiempo de oración personal, somos más eficaces cuando nos reunimos. La oración es simplemente la forma en que hablamos con Dios y Él nos habla.

Jesús enseñó a sus discípulos a orar. Mateo 6:5-6 (NLT), dice "Cuando oren, no sean como los hipócritas que aman orar públicamente en las esquinas y en las sinagogas, donde todo el mundo puede verlos. Les aseguro que esa es toda la recompensa que obtendrán. Pero cuando reces, vete solo, cierra la puerta detrás de ti y reza a tu Padre en privado. Entonces tu Padre, que lo ve todo, te recompensará".

Aquí hay cinco maneras de encender su tiempo de oración personal.

1. Haz citas regulares con Dios y cúmplelas.

(como lo harías con una cita con el médico, con la peluquería o con un amigo). Anótalo en tu calendario. Encuentra tu lugar y tu hora para reunirte con Dios. Escoge una hora en la que no te interrumpan ni te distraigan. Este es su tiempo de oración personal con el Señor, así que llegue a tiempo (con su Biblia, su diario, su música de adoración, su café o lo que necesite).

2. Recuerda a quién rezas.

¿Sabes que la gente de otras religiones reza a diferentes dioses? Recuerda a quién rezas. Estás rezando al Único y VERDADERO DIOS VIVO, el Padre Celestial en el nombre de Jesús. ¡El Dios de la Biblia que tiene el poder de cambiar todo!

3. Dios responde a la oración.

La oración es una conversación. Tú hablas con Dios y Él te habla. Él responde a la oración. EL OBJETIVO PRINCIPAL DE LA ORACIÓN ES CONOCER A DIOS. La oración es un vehículo para una conversación. No es una conversación unidireccional; tenemos que dar a Dios la oportunidad de hablarnos.

4. Deja los resultados en manos de Dios.

Cuando reces, debes saber que pones tus peticiones en las manos de Dios y dejas los resultados en sus manos.

No dejes de rezar. No estamos al mando. Pregúntale a Dios cómo debes orar y luego ora de acuerdo a su voluntad. Lleva tus cargas a Él y déjalas allí.

5. Planifica tu tiempo de oración.

Planifique con antelación su tiempo de oración personal. Aquí tienes algunas ideas prácticas para desarrollar tu tiempo de oración.

a. Decide cuándo y dónde vas a rezar

b. Lleve un diario de oración. Registra lo que sientes que el Señor te está diciendo, registra tus peticiones de oración y alabanzas.

c. Dedica tiempo a ESCUCHAR lo que el Señor te dice a través de la oración y las escrituras.

d. Cambia la rutina. No hagas siempre lo mismo. (Adoración, lectura de las escrituras, diferentes formatos, diferentes peticiones, diferentes posturas y orar en el espíritu).

Los modelos de oración son formas de organizar tu tiempo de oración. Aquí hay algunos modelos para que pruebes en tu tiempo de oración personal.

1. ElPadre Nuestro -Jesús lo modeló:

Mateo 6:9-13 (NKJV), "Por lo tanto, oren de esta manera:

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad Así en la tierra como en el cielo. 11 Danos hoy nuestro pan de cada día. 12 Y perdónanos nuestras deudas, Como nosotros perdonamos a nuestros deudores. 13 Y no nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del maligno. Porque tuyo es el reino, el poder y la gloria por siempre. Amén.

a. Primeras cinco líneas (vs 9-10) ¡Las primeras cinco líneas (vs 9-10) reconocen a QUIÉNES oramos!

b. Las segundas cinco líneas (vs 11-13) Las segundas cinco líneas (vs 11-13) son POR QUÉ oramos (pedir por las necesidades diarias, el perdón de los pecados y la guía de Dios)

c. La última línea (vs 13b) adora, alaba y reconoce la autoridad de Dios en nuestra vida

2. ACTOS

a. Adoración (recuerda a quién le rezas)

b. Confesión (estamos perdidos sin el Señor)

c. Acción de gracias (estamos agradecidos por todo lo que ha hecho)

d. Súplica (hacer llegar nuestras peticiones)

3. Áreas de interés:

Organice sus peticiones de oración en Seis áreas enfocadas para peticiones de oración:

1. Mundo

2. Comunidad (Estados Unidos, MN, Ciudades, Iglesia, lugar de trabajo)

3. Familia/personas queridas

4. Cargas

5. Perdido

6. Bendiciones

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Asegúrese de celebrar la finalización del ayuno con nosotros en la Noche de la Visión, el 4 de febrero a las 6 pm en la ubicación de Spring Lake Park. El final de este servicio marcará la finalización del ayuno para nosotros como cuerpo de la iglesia.

• 21 Días de Oración es un tiempo en el que buscamos intencionalmente a Dios cada día en oración mientras creemos que Él se mueve de manera poderosa. Si te estás preparando para una próxima temporada de 21 Días de Oración o quieres aprender más sobre cómo fortalecer tu vida de oración personal, utiliza estos recursos para ayudarte.

  • Enseñanza sobre el ayuno | Pastor Nathan Grams
  • God's Chosen Fast | Libro de Arthur Wallis
  • AWAKENING | Libro de Stovall Weems
  • The Forty-Day Word Fast | Libro de Tim Cameron
  • Encendiendo su tiempo de oración personal | por la pastora Jodi
  • Leveling the Praying Field | Libro de Donna Barrett
  • Ayunando con Dios - Encontrando Avance y Poder en los Nombres de Dios by by Tammy Hotsenpiller